Editorial Prisma N° 28

  • Tiempo de lectura:5 minutos de lectura

Este comienzo de año, ha sido vertiginoso en nuestra ciudad, que por cierto no escapa a las vicisitudes de la coyuntura nacional, sino por el contrario incorpora nuevos elementos. A los pocos días de iniciado el año, más precisamente el 2 de enero, el sistema educativo privado de la ciudad nos mostró su peor rostro: un patrón cerrando una escuela, huyendo sin dar explicaciones y dejando a toda una comunidad educativa en la peor de las incertidumbres. Los padres perplejos, sin saber cómo continuarían sus hijos los estudios, mientras que los trabajadores perdían su fuente de trabajo. En esta situación crítica los docentes del Guido Spano dejaron bien en claro a toda la comunidad de Buenos Aires, que los docentes somos mucho más que educadores, somos sujetos transformadores de la sociedad y que a la injusticia le respondemos con creatividad. Fue así, que los docentes se acercaron a SADOP y juntos empezamos a soñar. Y al poco tiempo ese sueño fue una realidad efectiva: en la primera semana de marzo la Cooperativa de Trabajo Guido Spano conformada por los trabajadores docentes y no docentes, abrió sus puertas para recibir como todos los años a los alumnos y sus padres.

Casi en simultáneo a este proceso inédito para la educación pública de gestión privada, se iniciaron las negociaciones paritarias en la ciudad, enmarcadas en la Mesa de Negociación y Condiciones de Trabajo. Es el momento donde la opinión pública y publicada se torna monotemática. Todos hablan de la educación, de si comienzan las clases o no, si el aumento salarial es justo, de que los chicos son rehenes, y todo el conjunto de lugares comunes que nos podamos imaginar. Debates superficiales, que son fruto de especulaciones que poco tienen que ver con los trabajadores de la educación. Como señala nuestro Secretario General Mario Almirón: “Se trata de defender el poder adquisitivo del salario docente. Pero no solamente eso. También de mejorar el conjunto de las Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, deterioradas por un modelo de relaciones laborales que durante largo tiempo no ha puesto al docente como centro del sistema educativo…” Este es el debate fundamental para el SADOP, y desde la Seccional Ciudad de Buenos Aires, militamos incansablemente en este sentido.

Hay que defender el poder adquisitivo del salario, que desde fines del año pasado fue fuertemente golpeado por las especulaciones de los sectores económicos asociados al pasado neoliberal; pero también resulta imperioso recomponer las relaciones laborales, y el mejor instrumento para vehiculizar este objetivo es el Convenio Colectivo de Trabajo. Por lo que no puede pasar desapercibido que en el marco de la Paritaria Federal Docente, el gobierno nacional y los sindicatos enrolados en la CGT junto a la CTERA se comprometieron a trabajar desde mayo en el Convenio Colectivo para todos los trabajadores de la educación del país. Un reclamo histórico que se vuelve realidad.

Finalmente, queríamos compartir algo que nos enorgullece y expresa el rol integral que deben tener los sindicatos. El 19 de febrero inauguramos el taller sobre violencia laboral, con la colaboración del Programa de Extensión de Asistencia a Víctimas de Mobbing de la Facultad de Psicología de la UBA. El taller surgió a partir de una demanda concreta de los docentes que padecen o han padecido alguna situación de maltrato laboral. Ya que tenían la necesidad de contar con instrumentos nuevos. Y como sabemos muy bien, donde hay una necesidad hay un derecho. Y SADOP Seccional CABA, va a caminar siempre al lado de los docentes peleando por la restitución y ampliación de sus derechos laborales.

Es evidente, que este 2014 arrancó muy intenso. Probablemente continúe de esta manera. Lo que sí les podemos garantizar es que vamos a estar en el lugar y en el momento indicado que la historia nos exija, con nuestra bandera bien el alto, luchando por una ciudad y una patria cada vez más justa, solidaria y unida.