Desde SADOP Capital exigimos a nuestrxs empleadorxs que cumplan con los parámetros imprescindibles para la presencialidad pedagógica cuidada. En este sentido resulta central el cumplimiento irrestricto del protocolo porteño y de las resoluciones del Consejo Federal de Educación.
Les pedimos, también, que acompañen la voluntad de todxs lxs docentes privadxs de la ciudad en el cuidado de la vida y la salud de nuestras comunidades porque el escenario de alarma epidemiológica pone en peligro la vida de lxs trabajadores docentes y no docentes, directivxs, estudiantes y familias.
Pero no solo pedimos, vamos a seguir trabajando en cada escuela, colegio o Jardín siendo implacables en el control y monitoreo del cumplimiento de los protocolos vigentes.
El ministro de Salud de la ciudad, en el día de hoy, dejó en claro que no tiene dudas que tenemos por delante una nueva ola. Lxs docentes no queremos seguir siendo conejillos de indias, queremos la presencialidad, lo dijimos desde el principio. Pero la presencialidad tiene que ser condicionada, acotada y administrada.
Mientras, al mismo tiempo y movido por quien sabe que tironeo electoral interno, el Jefe de Gobierno de la ciudad Horacio Rodríguez Larreta amplía los criterios de presencialidad en las escuelas al tomar la decisión de la vuelta a clases presenciales completa en nivel medio.
Es un momento donde la comunidad educativa en su totalidad tiene que seguir cuidando la salud y la vida de todxs. Docentes, estudiantes, familias y autoridades tenemos que monitorear y modificar la dinámica escolar permanentemente de acuerdo a distintos parámetros. Hoy, por ejemplo, es imposible dictar clases normales frente a las bajas temperaturas. Mientras que nuestrxs empleadorxs no invirtieron en comprar medidores de dióxido de carbono ni acondicionar los sistemas de calefacción lo único que quieren es que lxs estudiantes no pasen frío y cierran las ventanas anulando la ventilación.
Desde SADOP Capital proponemos encontrar el camino de acotar por ejemplo en la temperatura relativa ambiente y establecer que por debajo de determinados parámetros no poder continuar con la dinámica presencial. O administrar el uso de medidores de dióxido de carbono para reforzar la ventilación de los espacios sin estudiantes para luego volver a espacios ventilados y seguros.
Finalmente, es importante destacar que el plan de vacunación en la ciudad avanza sistemáticamente. Pero es necesario que esté acompañado por medidas de cuidado para que no sigamos lamentando más el fallecimiento de trabajadorxs en nuestras escuelas. La presencialidad no puede ser un imperativo atado a especulaciones electorales.
Con el avance del plan de vacunación acompañado con una presencialidad administrada vamos a poder recuperar la dinámica escolar que todxs anhelamos.
Consejo Directivo
SADOP Seccional Capital