Hoy se celebra el día del docente de modalidad especial. La fecha evoca la creación de la Rama Técnica de Educación Especial en nuestro país. Un largo trayecto ha recorrido en Argentina hasta ser reconocida como una modalidad con identidad y objetivos propios en la Ley de Educación Nacional. Coherente con un proyecto de País para Todos, y no sólo para algunos, la normativa vigente consolida un principio fundamental: el de la inclusión educativa.
Ser especial es ser único, irrepetible, diferente y a la vez igual a todo ser humano. Hablar de educación especial es pensar en una respuesta adecuada a una necesidad educativa especial. Es atender y garantizar el derecho humano a la educación de las personas con discapacidades temporales o permanentes. Supone propiciar alternativas de continuidad para su formación durante toda la vida.
Educar siempre requiere de un fuerte compromiso. Es un acto de amor y entrega. Educar en la modalidad especial supone un compromiso especial. Como sociedad, debemos revalorizar la labor que cumplen los maestros especiales, dignificando sus condiciones de vida y de trabajo. La implicancia personal que su trabajo requiere, la complejidad del acto pedagógico que llevan adelante (a veces sin las mínimas condiciones para hacerlo) y el compromiso ético que asumen, merecen un mayor reconocimiento.
Son ellos quienes hacen realidad en cada escuela el acceso a la educación para todos, sin discriminaciones ni inequidades. Son ellos quienes todos los días entregan su esfuerzo para que muchos compatriotas tengan Justicia en las oportunidades y posibilidades educativas.
El grado de desarrollo de una sociedad puede medirse no sólo por el Producto Bruto Interno (PBI), sino también por cómo son tratados los más débiles, aquellos más desfavorecidos.
La “sintonía fina”, a la que nuestra Presidenta nos convoca, implica no tratar a todos por igual, sino favorecer más a los más necesitados. Sin dudas, los docentes de modalidad especial merecen un tratamiento distinto en sus Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo y también en su régimen jubilatorio, ya que es también especial su situación.
A todos los docentes de educación especial saludamos y felicitamos en su día, comprometiéndonos a continuar nuestra lucha por dignificar su tarea.
MARIO ROMÁN ALMIRÓN
SECRETARIO GENERAL
–SADOP-CDN