El Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP) abordó el tema de la mediatización del terrible caso de Melina Romero, la chica de 17 años violada, asesinada a golpes y arrojada en una bolsa en la vera del Río Reconquista. "Es una muestra de la construcción simbólica y estigmatización que realizaron algunos comunicadores, es una caracterización discriminatoria basada en el imaginario socio-marginal que edificaron", aseguró Mario Almirón, Secretario General del gremio durante el último Consejo Directivo.
"El machismo absurdo que expresan ciertos sectores de la sociedad volvió a salir a la luz y colocó a la víctima en victimaria. Todo por un punto de rating o la venta de diez ejemplares más", aseveró Almirón. El Sindicato docente expresó que el aula debe ser uno de los espacios para contribuir a desarmar el imaginario social de mujeres desechables, concientizar a la población, enseñar a leer medios y repudiar los mensajes con violencia mediática. Además que los maestros y profesores no tendrían que tener un rol pasivo frente a las noticias, deberían entender, procesar y enseñar cómo recibirlas. Comprender el sentido del mensaje y ejercitar una lectura crítica simbólica.
¿Cómo tratar un tema tan sensible en los colegios? Es vital poner ejemplos edificantes, concientizar y hacer hincapié en las normas de convivencia, respeto por la identidad, los derechos del otro, el valor de la familia y contribuir a desterrar la construcción socio-cultural de la mujer como objeto sexual. Charlar y explicar a los alumnos que la cosificación femenina no sirve para vender más publicidad sino que construye un simbolismo nocivo. Hay que tener en cuenta que en 2013 hubo en Argentina 295 femicidios (tanto de adultas y como de niñas), cada 30 horas una mujer fue asesinada por violencia sexista, según datos de la Asociación Civil la Casa del Encuentro.
Por eso, el aula también puede ser un espacio para marcar y enseñar cómo se quebrantó, en el caso Melina Romero, la Convención Internacional sobre Derechos del Niño, que está incorporada a la Constitución Nacional, la Protección Integral a las Mujeres y la violencia de género. "La concientización en cada colegio sobre la construcción del relato mediático nos da herramientas para prevenir y evitar estigmatización, pero también es un elemento esencial para desterrar cualquier tipo de violencia contra la mujer. Los docentes somos actores fundamentales de cambio. Podemos y queremos aportar toda nuestra capacidad crítica para transformar la sociedad", finalizó Almirón.